Ene 19

Se pule la guía para elegir autoridades seccionales y del Consejo de Participación

Se aprobó el voto telemático para el exterior y un nuevo orden para los escrutinios de las votaciones.

El 2023 Ecuador acudirá nuevamente a las urnas para elegir a prefectos, alcaldes, concejales urbanos y rurales, vocales de las juntas parroquiales y a los integrantes del Consejo de Participación Ciudadana. 

La fecha de la elección aún está por definirse, pero de acuerdo con lo que han adelantado las autoridades del Consejo Nacional Electoral (CNE), tentativamente podría ser el 5 de febrero del próximo año. 

El Código de la Democracia establece que en todos los procesos de elección popular, el CNE, previo a la aprobación del calendario electoral, deberá coordinar con el Tribunal Contencioso Electoral (TCE) la propuesta de cronograma a aplicar en las diferentes fases. 

La aprobación de este calendario se cumpliría en las próximas semanas, con lo que arrancará el periodo electoral, que es el ciclo que integra todas las actividades y operaciones que se desarrollan en las etapas preelectoral, electoral y post electoral.

En este sentido, el Pleno del CNE aprobó las directrices generales que se aplicarán en las elecciones seccionales de 2023.

Enrique Pita, vicepresidente del organismo, manifestó que para cada proceso es necesario aprobar las directrices, que son un conjunto de normas e instrucciones para proyectar el plan operativo electoral, afinar el presupuesto y establecer los hitos del calendario. 

Las líneas generales 

El  documento aprobado por el Pleno contempla algunos cambios en relación a procesos anteriores. Uno de los más significativos es el escrutinio de votos.

En las elecciones seccionales de 2019 las tres papeletas de los candidatos al Consejo de Participación Ciudadana se contaron al último, luego del resto de dignidades.

Para las próximas elecciones se escrutarán en tercer lugar, luego de contar los votos para prefectos y alcaldes.

Pita aseguró que es una medida acertada, ya que en el 2019 quienes integraron las juntas receptoras del voto dejaron las actas en blanco o no escrutaron esos votos. 

Otra meta que se ha propuesto el CNE es que en el exterior se cumpla el voto telemático (por Internet) en unas 50 zonas electorales, para lo cual se contará con una fase previa de empadronamiento.

El informe técnico señala que esta modalidad ayudará al cumplimiento de las medidas sanitarias dispuestas por los distintos países debido a la pandemia del coronavirus.  

Los electores registrados podrán sufragar desde sus domicilios y el CNE no incurriría en gastos operativos de alquiler de recinto electoral, pago del servicio de courier, compensación económica a miembros de las juntas receptoras del voto, materiales de oficinas y material de bioseguridad. En el resto de zonas se mantendrá el voto presencial.  

En lo local, se propone implementar un plan piloto de votación electrónica y registro electoral biométrico, considerando como muestra 4.000 juntas receptoras del voto, siempre y cuando se cuente con la capacidad tecnológica y disponibilidad presupuestaria.

La consejera Esthela Acero dijo que para implementar el voto electrónico es necesario recoger las opiniones de las organizaciones políticas, ya que aún el sistema no se ha  consolidado y existe la desconfianza ciudadana.

Otros detalles

  • En el país el voto es facultativo para miembros de la fuerza pública. De las estadísticas que maneja el CNE, el ausentismo en este grupo se ha incrementado desde el 2013 y en la primera vuelta de las elecciones presidenciales de 2021 se ubicó en más del 90%. El CNE tomó la decisión de que en cada Junta Receptora del Voto podrán sufragar máximo cuatro miembros de las Fuerzas Armadas y Policía Nacional en servicio activo. 
  • En el país las juntas receptoras del voto se mantendrán con 350 electores cada una, ya que el tiempo de escrutinio se reduce. En el exterior se determinó 800 electores por junta, tomando como referencia la participación en procesos electorales anteriores.
  • En cada junta receptora del voto habrá dos urnas: una para las papeletas de prefecto y alcalde y otra para concejales, miembros de las juntas parroquiales rurales, y consejeros de Participación.
  • Se mantendrán tres niveles de seguridad en las papeletas y en los documentos electorales, incluido seguridad anti copia y anti escáner.
  • La conformación de las juntas continuará con tres vocales principales con sus respectivos suplentes y un secretario. Se priorizará a estudiantes universitarios. 
  • En los padrones electorales se incluirá una columna en cada nombre del elector, para que el miembro de la junta incluya una marca que identifique si votó o no votó.

Diana Atamaint, presidenta del CNE, dijo que son directrices que pueden ser modificadas en el avance del proceso electoral, de acuerdo con las circunstancias que se presenten, como por ejemplo la evaluación de la pandemia por el coronavirus. 

Para recordar

En el 2023, por segunda ocasión, se elegirá por voto popular a siete consejeros principales y siete suplentes del Consejo de Participación Ciudadana. Hasta antes del 2019 se nombraba a través de un concurso de méritos y oposición a cargo del CNE.

En la consulta popular del 2018 se aprobó que los consejeros debían ser elegidos por sufragio universal, directo, libre y secreto cada cuatro años, coincidiendo con las elecciones a las autoridades de los gobiernos seccionales.

El CNE continúa a cargo de la verificación de requisitos de los postulantes.

Sin embargo, la norma establece que para la comicios se elaborarán tres papeletas para esta elección: una de mujeres, una de hombres, y una de pueblos y nacionalidades indígenas, afroecuatorianos o montubios y de ecuatorianos en el exterior.

Los electores podrán votar por hasta siete candidatos: tres candidatos de la lista de hombres, tres candidatas de la lista de mujeres y un candidato de la lista de los pueblos y nacionalidades indígenas, afroecuatorianos o montubios y de ecuatorianos en el exterior. 

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