El precandidato usa una camiseta con el logo de la Policía Nacional. Un experto señala que dicha prenda no es uniforme y que no hay una norma expresa respecto a ese uso.
La desinformación toma un ritmo cada vez más acelerado en medio del proceso electoral anticipado que vive Ecuador. Tras la firma de la muerte cruzada por parte del presidente Guillemo Lasso, las redes sociales se han llenado de información falsa o descontextualizada para llegar al electorado.
Una publicación de Facebook asegura que el precandidato a la Asamblea y exministro del Interior, Patricio Carrillo, usa el logo de la Policía para su campaña política. Además, la publicación afirma que este hecho sería una infracción electoral por utilizar un bien público.
Calificamos esta información como imprecisa. El video de Carrillo es real, pues el clip fue publicado en la cuenta de TikTok del precandidato, el pasado 25 de junio. Aunque, según expertos el uso de la camiseta en el video de Carrillo no incurre en ninguna ilegalidad y es legítimo.
En el clip, Patricio Carrillo aparece en un bicicleta utilizando un buzo deportivo con los colores y logos de la Policía Nacional. En la espalda, el precandidato tiene escrito su nombre bajo un logo grande de la institución. “Menos vicio, más deporte”, se escucha decir a Carrillo al bajar de la bicicleta.
En su cuenta, el precandidato ha empezado a difundir videos sobre sus visitas a territorio y acciones de campaña, incluso antes del inicio oficial de la campaña electoral.
Entonces, ¿esto puede considerarse una infracción electoral?
La respuesta es complicada. Para Carlos Aguinaga, exvocal del extinto Tribunal Supremo Electoral, el uso de la camiseta en el video de Carrillo no incurre en ninguna ilegalidad y es legítimo.
“En primer lugar, la camiseta no es uniforme. Por otro lado, por legislación, los generales en servicio pasivo como Carrillo pueden utilizar los uniformes que quieran, incluso pueden ir a actos oficiales uniformados a pesar de haber salido de la institución. La camiseta deportiva de ciclismo tiene un logo de Policía como puede tener el logo de Barcelona o de la Liga. No hay norma expresa alguna respecto a este uso, es un uso legítimo y legal. Lo único que se prohíbe en el Código de la Democracia es el uso de la bandera del Ecuador o el escudo como distintivos de un partido”, dice.
Aguinaga asegura que lo que busca Carrillo, en “un mensaje subliminal”, es que se lo conecte con la Policía Nacional. El experto legista destacó que desde el Consejo Nacional Electoral (CNE) no ejerce un riguroso control electoral para evitar que las redes sociales se conviertan en espacios sin Ley en temas electorales, donde se ha desarrollado “una guerra digital con campaña negra”.
Saudia Levoyer, periodista y académica, aclara que no se estila utilizar los símbolos de la Policía en las campañas electorales. Según explica, porque existe una prohibición para el uso de bienes del Estado y la imagen de instituciones para hacer proselitismo político. “Si bien en las redes no está regulada la campaña, no implica que puedan utilizar símbolos que normalmente no se permiten”.
Carrillo, en este caso, utiliza su condición de oficial en servicio pasivo de la Policía para dar un mensaje de campaña y hacer proselitismo. Con esto concuerda Rodrigo Jordán, analista político. El experto detalla que en estas elecciones la seguridad es una prioridad, lo que lleva a los candidatos a convertirse en el arquetipo de persona que pueda solucionar estos problemas.
“Quieren asumir ese arquetipo de héroes y usarán todos los recursos para respaldar eso. Carrillo utiliza ese recurso para asociarse como un héroe de seguridad, al ligarse con la Policía.”, dice.
Patricio Carrillo es General Inspector de la Policía en servicio pasivo. El precandidato a la Asamblea es magíster en Diseño de Políticas Públicas por la Universidad de Chile y la Academia Federal del Brasil, y doctor en Administración por la Universidad Técnica Particular de Loja.
El 10 de enero de 2020, Carrillo fue nombrado Comandante General de la Policía en el Gobierno de Moreno y se mantuvo en el cargo hasta marzo de 2021. En marzo de 2022 fue designado como ministro del Interior por Guillermo Lasso, puesto que dejó en septiembre de 2022 por pedido del Primer Mandatario tras el asesinato de María Belén Bernal.
Meses más tarde, Carrillo fue llevado a juicio político por la Asamblea cesada, donde se le acusó de haber reprimido a manifestantes en las movilizaciones de junio de 2022 y de ser parte de los responsables del femicidio de Bernal. Con 105 votos a favor y 19 abstenciones, el exfuncionario fue destituido y censurado.
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